Desde su lanzamiento los videojuegos han sido considerados los enemigos más grandes para el desarrollo físico como psicológico de los niños, debido al estigma de que pueden llegar a ser adictivos o que son una pérdida de tiempo.

No obstante,  Sony Computer Entertainment ha anunciado que tan solo dentro del periodo navideño ha vendido 5.6 millones de consolas de “Play station 4”, y en su totalidad desde su nacimiento se han vendido 91.6 millones de unidades alrededor del mundo. Estos datos más el hecho de que estos juegos se han convertido en el pasatiempo favorito de 60% de niños y adolescentes en la actualidad, dan como resultado la importancia de conocer los conceptos, características, consecuencias, ventajas e inconvenientes que rodea el mundo de los videojuegos (Bacaflor, Vaca, Roger, 2018; 3D Juegos, 2019; ABC, 2019).

Los videojuegos nacieron en los años 70, tras la creación de los juegos de simulación para la preparación militar, por ende, se considera que son todos aquellos juegos electrónicos interactivos que se pueden jugar tanto en máquinas, consolas, computadoras como también teléfonos celulares, que han venido causando todo tipo controversia desde su nacimiento debido a su extensa clasificación, desde los juegos arcade (laberintos), de estrategia (aventura), de simulación, mesa y deportivos, hasta aquellos videojuegos que más discusión han causado, los de acción, debido a su contenido violento (Contreras & Contreras, 2014).

Ralph Baer, creador de la primera consola Magnavox Odyssey

Dentro de los últimos años han surgido estudios en los que hablan de los beneficios de los videojuegos, aunque durante mucho tiempo han venido causando polémica y preocupación entre padres, educadores, psicólogos y profesionales de la salud de los niños, por las posibles consecuencias negativas que pueden tener en el desarrollo y conducta de los niños que utilizan con regularidad estos aparatos, por otra parte existen fundamentos teóricos y prácticos que sustentan que el jugar en las consolas cierto tipo de juegos no causa ningún tipo de conflicto y es más, potencian cierto tipo de destrezas como por ejemplo: la atención, la focalización, habilidades visoespaciales,  toma de decisiones, seguimiento de instrucciones, habilidades numéricas, reconocimiento de palabras, motivación, atención selectiva, procesamiento paralelo, pensamiento creativo o estrategias de comunicación. De igual manera se ha propuesto que la práctica ocasional de videojuegos puede facilitar la adquisición de estrategias de: “aprender a aprender”; “aprender en la acción” y por ende se mejoran los tiempos de reacción y las respuestas emocionales (León & López; Marques, 2000; Tejerio, & Pelegrina, 2017).
Asimismo, es importante entender que debido a que crean y vivencia un mundo irreal, estos juegos se implantan fácilmente en la vida de los niños y adolescentes debido a que ofrecen una gran variedad de actividades que no se podrían hacer en la vida cotidiana, como manejar, abuso de autoridad, agresividad, bullying, chocar, robar, además de que puede ser causante de obesidad, entre otras (Gonzales, et al. 2017; Tejerio, & Pelegrina, 2017) Por lo que se vuelve sumamente importante analizar ambos polos para poder generar un buen concepto y uso de los mismos dentro de los hogares.
De esta manera, los oponentes del uso de videojuegos en niños, sustentan su juicio a partir de la idea que restan tiempo de estudio, favorecen conductas agresivas, limitan el desarrollo de habilidades sociales causando un aislamiento social, favorecer el consumismo, frenan el desarrollo motriz, carecen de contenido valórico como también generar sentimientos de competencia entre los usuarios (Bacaflor, Vaca, Roger, 2018; Rojas, 2008).
Por el contrario los defensores del uso de videojuegos, mencionan que al jugar se crea una nueva forma de disfrutar, socializar y convivir entre los pares, debido a que a esta edad se vuelve importante la aceptación del medio en que el niño/adolescente vive, por lo cual el jugar videojuegos, y determinados juegos se encuentra en el colectivo de cada niño, por lo que se genera una tendencia en ciertos juegos (Bacaflor, Vaca, Roger, 2018).

«el abuso de la utilización de los videojuegos pueden llegar a causar conductas compulsivas y des-adaptativas» – (Bacaflor, Vaca, Roger, 2018)

De igual forma, sustentan que cierto tipo de juegos favorece enormemente el desarrollo de los niños dado que ayuda en el autocontrol, potencia aprendizajes y coordinación oculomotor, crean espacios de seguridad y generan una buena autoestima, dado que otorga la posibilidad de mejorar las habilidades sociales cuando se juega en red. Como también, mejoran habilidades cognitivas como la capacidad inventiva, creativa, intelectual y de análisis. En esta misma línea mantienen que la utilización de videojuegos en adultos actúa como un agente liberador de estrés y regulador del estado de ánimo (Brenes & Pérez 2015; Marques, 2000; Rojas, 2008). Es necesario mencionar que a través del estudio de León & López (2000), en donde se analizan varios estudios, determinaron que no existe una correlación entre los juegos de video y el desarrollo de una patología psicológica.

No obstante, otros estudios han determinado que existe un aprendizaje de violencia ligada a los videojuegos, gracias a que el aprendizaje de los niños se basa fundamentalmente en el modelo de aprendizaje vicario y observacional, es decir, que la exposición repetitiva de modelos agresivos puede incrementar los niveles de agresión en los niños debido al contenido que tienen cierto tipos de videojuegos. (León & López; Rojas, 2008).

Entonces, primeramente hay que entender que la industria de los videojuegos seguirá creciendo, por lo que los niños y adolescentes seguirán siendo expuestos a esta difusión electrónica, por lo que como padres, profesores y profesionales de la salud de niños y adolescentes deben comprender, entender y manejar esta situación a su favor, y observar que la tecnología, y en sí mismos los videojuegos pueden llegar a ser una herramienta útil dentro de las aulas como los hogares.
Reconocer que el uso del juego como de los videojuegos se ha vuelto tan importante y necesario, para los niños, que es mejor aprender a controlar esta situación es cada hogar, como beneficio o recompensa cada que se comportan bien, y dar espacios para que puedan jugar, mas no excederse de un tiempo normal, así para los niños de 0 – 3 años el tiempo de exposición debe ser no más de 30 minutos, mientras que para los niños entre los 3-6 se aconseja que jueguen 1 hora a dos  por semana, y para los niños entre 6 a 12 años no más de 9 horas por semana (As.com, 2016). Por último es importante mencionar que no es aconsejable que los niños jueguen videojuegos antes de dormir, durante la alimentación o para calmar un berrinche o rabieta.

Es decir, que el abuso de la utilización de los videojuegos pueden llegar a causar conductas compulsivas y des-adaptativas (Bacaflor, Vaca, Roger, 2018), sin obstar, en el estudio de Brenes & Pérez (2015), se encontró que solamente en los individuos que tienen una disposición pre existen en su personalidad, los videojuegos con contenido violento, pueden llegar a afectar su comportamiento; entonces, se concluye que los videojuegos con contenido violento no solo estimulan conceptos negativos sino también positivos en niños y adolescentes.
Lo que es más, en un meta análisis publicado en un estudio de (Jiménez, Chacón, 2012), se estudiaron los efectos de los videojuegos violentos en conductas agresivas se encontró que la exposición a videojuegos con contenido violento es predisponente a un factor de riesgo causal para conductas agresivas y/o comportamiento social reprimido.
Asimismo, en un estudio tipo trasversal realizado en Irán por Jiménez y Chacón (2012), con 444 adolescentes se determinó que las personas que utilizan videojuegos a edades más tempranas tienen una mayor predisponían a tener una peor salud mental, de esta manera, el comportamiento agresivo percibido por los adolescentes era mayor mientras se aumentaba el tiempo de exposición a los videojuegos. No obstante, se descubrió dos hallazgos importantes, que los niños mostraron más comportamientos agresivos a diferencia de las niñas que juegan de manera excesiva. Y, que los niños que no han jugado videojuegos mostraban peores resultados de salud mental (Jiménez, Chacón, 2012).
Por otro lado, hablando de los efectos cognitivos de los videojuegos, en Turquía se realizó un estudio que se menciona en el artículo de Jiménez y Chacón, (2012); a niños entre 9 y 12 años, utilizando la prueba de Stroop (prueba que mide atención) para medir los efectos de los videojuegos en la atención, en el cual se concluyó que se la atención en sí mejora cuando se juega por primera vez, debido a que se aprende algo nuevo, por lo que en si existe una curva de aprendizaje debido a que aumenta la activación cerebral pre-frontal y frontal; no obstante, crónicamente va desapareciendo este beneficio debido a que la exposición a largo plazo de videojuegos deteriora la atención, sobre todo en niños o adolescentes con Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) (Jiménez, Chacón, 2012).
Es por ello que el uso de videojuegos o de aparatos electrónicos afecta igualmente nuestra parte fisiológica, en sí, en nuestros niveles hormonales. Varios estudios realizados a lo largo del tiempo como es el de Beaven, Ingram, Gill, & Hopkins, (2010) han demostrado que los niveles de testosterona aumentan con los jugadores que ganan un juego en comparación con los que pierden. Se conoce que la testosterona y el cortisol se liberan post ejercicio, y que juegan un rol importante en la adaptación del organismo, aunque una exposición elevada a ambas hormonas, tiene efectos negativos sobre nuestro organismo como depresión, ansiedad, reducción de actividad inmunológica y pérdida de memoria. (Beaven, Ingram, Gill, & Hopkins, (2010)
Es sumamente importante mencionar que, actualmente, los videojuegos juegan un papel muy importante en el tratamiento de ciertos problemas físicos como emocionales que pueden aquejar a los niños, así por ejemplo se ha demostrado que ayudan a incrementar la iniciación de interacciones sociales entre niños con autismo y sin autismo, además se ha visto que el jugar incrementa el auto control entre jóvenes delincuentes institucionalizados. Igualmente, aporta de gran manera en la motivación y estimulación de niños que se encuentran pasando por procesos de rehabilitación cognitiva  con dificultades en la atención, como también en el desarrollo de la interacción social entre jóvenes con necesidades educativas especiales niños con discapacidades severas. Finalmente, ayudan en el establecimiento de rapport  con niños durante las sesiones de psicoterapia. Además de que también ayudan a bajar los niveles de estrés durante intervenciones dentales, o niños que reciben quimioterapia, y niños con anemia falciforme durante su tratamiento (Tejerio, & Pelegrina, 2017)

Entonces, primeramente hay que entender que la industria de los videojuegos seguirá creciendo, por lo que los niños y adolescentes seguirán siendo expuestos a esta difusión electrónica, por lo que como padres, profesores y profesionales de la salud de niños y adolescentes deben comprender, entender y manejar esta situación a su favor, y observar que la tecnología, y en sí mismos los videojuegos pueden llegar a ser una herramienta útil dentro de las aulas como los hogares.
Reconocer que el uso del juego como de los videojuegos se ha vuelto tan importante y necesario, para los niños, que es mejor aprender a controlar esta situación es cada hogar, como beneficio o recompensa cada que se comportan bien, y dar espacios para que puedan jugar, mas no excederse de un tiempo normal, así para los niños de 0 – 3 años el tiempo de exposición debe ser no más de 30 minutos, mientras que para los niños entre los 3-6 se aconseja que jueguen 1 hora a dos  por semana, y para los niños entre 6 a 12 años no más de 9 horas por semana (As.com, 2016). Por último es importante mencionar que no es aconsejable que los niños jueguen videojuegos antes de dormir, durante la alimentación o para calmar un berrinche o rabieta.

En Conclusión, debemos resaltar que los estudios realizados hasta la fecha son contradictorios, por lo que es recomendable aplicar reglas en cada casa diferentes, y acorde a los valores de cada familia. No obstante se debe recordar que jugar videojuegos resulta ser más activo que ser sedentarios, sin embargo, los videojuegos activos dan mejores resultados que los videojuegos pasivos (Jiménez, Chacón, 2012).

Ahora, el juego libre provee más beneficios a los niños que cualquier otro tipo de juego dado que el juego es importante tanto para el desarrollo físico del niño porque el correr, saltar, flexionar o entender sus extremidades superiores como inferiores influye positivamente sobre la función cardiovascular, por lo que se regula mejor sus funciones físicas y ayuda al conocimiento de su esquema corporal, desarrollando en si integridad, coordinación y equilibrio.

Así, también el juego libre favorece el desarrollo afectivo/emocional dado que al recibir placer de esta actividad los niños descargan tensiones fácilmente y pueden expresarse con mejor agilidad. En fin, el juego libre, en si mismo ayuda a desarrollar la memoria, la autorregulación emocional, lenguaje oral y reconocimiento de símbolos, los cuales son herramientas y aptitudes esenciales en los procesos de aprendizaje de los niños (Proaño, 2009), es por esto que es aconsejable que al igual que tienen horas de obligación (deberes, limpieza o demás) tengan horas de diversión, de jugar en el patio, o parque, con sus amigos o sus padres.

Referencias

3D Juegos, (2019). Sony anuncia cuántas PS4 se han vendido en todo el mundo. Recopilado el día 8 de enero del 2019. Desde: https://www.3djuegos.com/noticias-ver/188913/sony-anuncia-cuantas-ps4-se-han-vendido-en-todo-el-mundo/

ABC, (2019). La consola PlayStation 4 sigue rompiendo récords cinco años después de su lanzamiento. Recopilado el día 8 de enero del 2019. Desde:
https://www.abc.es/tecnologia/videojuegos/ps4/abci-consola-playstation-4-sigue-rompiendo-records-cinco-anos-despues-lanzamiento-201901081413_noticia.html

As.com, (2016). ¿Cuántas horas a la semana deben jugar los niños videojuegos? Recopilado el 27 de febrero del 2019. Desde: https://as.com/tikitakas/2016/09/08/portada/1473349147_119599.html

Bacaflor, L., Alberto, C., & Vilca Masca, N. R. (2018). Los juegos en red y su influencia en el comportamiento social escolar en los estudiantes del segundo grado sección» A» del nivel secundario de la Institución Educativa Ciencias-Pedregal 2017.

Brenes-Peralta, C., & Pérez-Sánchez, R. (2015). Empatía y agresión en el uso de videojuegos en niños y niñas. Revista Latinoamericana de Ciencias Sociales, Niñez y Juventud, 13(1). Recopilado el da 27 de noviembre del 2018. Desde: http://www.redalyc.org/html/773/77338632009/

Contreras Eduardo y Contreras Isis (2015). Desarrollo de habilidades cognitivas mediante videojuegos en niños de educación básica. Revista Iberoamericana para la Investigación y el Desarrollo Educativo ISSN: 2007-2619, (12).

Gonzales, G., Zurita, F., Puertas, P., Espejo, T., Chacón, R., Castro, M. (2017). Influencia de los factores sedentarios (dieta y videojuegos) sobre la obesidad en escolares de Educación Primaria. Reidocrea. 6 (11). 120-129. Recopilado el día 26 de marzo del 2019. Desde: https://www.ugr.es/~reidocrea/6-11.pdf

Jiménez, J. M., & Araya, Y. C. (2012). El efecto de los videojuegos en variables sociales, psicológicas y fisiológicas en niños y adolescentes. Retos: nuevas tendencias en educación física, deporte y recreación, (21), 43-49.

León, R. López, M. (s/f). Los adolescentes y los videojuegos. Recopilado el día 18 de noviembre del 2018. Desde: http://copao.cop.es/files/contenidos/VOL21_1_5.pdf

Proaño, M. (2009). El funcionamiento del juego en la psicoterapéutica del centro Kontikion. Tesis (Maestría en Educación), Universidad San Francisco de Quito, Colegio de Postgrado; Quito, Ecuador.

Rojas, V. (2008). Influencia de la televisión y videojuegos en el aprendizaje y conducta infanto  juvenil. Revista chilena de pediatría. 79 Supl (1): 80-85. DOI:
http://dx.doi.org/10.4067/S0370-41062008000700012

Tejerio, Ricardo & Pelegrina, Manuel (2017). La psicología de los videojuegos, un modelo de investigación. Recuperado el día 02 de marzo del 2019. Desde:
https://es.scribd.com/document/346800850/La-Psicologia-de-los-Videojuegos

Elaborado por:

Belén Santacruz
Belén Santacruz
Especialista